26/7/13

EL PRI Y EL BONSAI INTELECTUAL


El gobierno apoya escritores, artistas (intelectuales) según convenga.

Salinas creó un sistema para beneficiar intelectuales y beneficiarse de ellos. El PAN necesitó diversificar el padrón intelectual para simular que era más abierto.

Creció el número de becas, apoyos, instituciones, programas y burócratas para chupar ese presupuesto.

Luego el PRI regresó. Y quiere otro grupo con él. Prepara un nuevo padrón intelectual.

Fue inteligente. Decidió depurar.

El padrón creado durante el PAN tiene muchos elementos anti–priístas. Este 2013 Conaculta ideó un recorte del 50% de los próximos integrantes del Sistema Nacional de Creadores de Arte, la lista de “quién es quién”.

En primera instancia, quiso interrumpir la continuidad directa de los miembros actuales. Tras cierta protesta, dio marcha atrás.

Otra medida para cerrar el círculo: borrar categorías de edad. Todos competirán dentro de una categoría de supuesta “excelencia”, es decir, adhesión a los dos o tres grupos intelectuales cercanos al gobierno.

Los intelectuales oficialistas serán los grandes beneficiados. Recuperarán mucho de la estructura que el PRI negoció con su líder (Paz).

La jugada es sagaz. Aprovecha la impopularidad del artista y el escritor.

Y reconcentra el poder cultural. Hará que en un país sin lectores, justicia o posgrados, muchos intelectuales que han usado premios, becas y apoyos para producir obra y carrera, salgan de escena. Se quedarán los mejor posicionados.

Quienes, con veintitantos mil pesos mensuales —más del doble de la actual beca— tienen un mensaje entrelíneas: tú también puedes ser recortado.

No se elegirá a los mejores. Se elegirá, poco a poco, a las y los más convenientes.

Recortar la mitad devolverá poder a los intelectuales allegados al régimen. Conaculta, a ritmo prudente, beneficiará —como antes— al séquito, y tachará tendencias que, efectivamente, debilitan la hegemonía.

Esa concentración del poder cultural, por ejemplo, en literatura, es claro hoy. Grupos intelectuales de la Ciudad de México e instituciones federales son sinónimos.

Entre los probables ganadores de esta vuelta de tuerca de la dictadura perfecta y la Intelligentsia Sin Adjetivos está Enrique Krauze y todas las butacas que él coordina.

El régimen pide creadores desconectados del encabronamiento de las mayorías. Figuras que luzcan bien en aparadores dentro y fuera del país.

Peña Nieto está obsesionado con la imagen de su gobierno. Quiere que los intelectuales no la dañen. Quiere que no hablen de problemas. E ironicen a los problemáticos.

El PRI es astuto. Decidió hacer de los intelectuales un bonsai.

Jugada maestra: cortar 50% de las ramas. Dejar únicamente un árbol chiquito. Y regarlo muy bien.

Para que, su Excelencia, el bon$ai, se quede contento, envidiable, enanito.